Instagram vuelve a sus anteriores políticas de uso tras el descontento de los usuarios

No cayeron bien la nueva política de privacidad y los términos de uso de Instagram entre su comunidad de usuarios, tanto, que muchos amenazaban con dejar para siempre la famosa aplicación para compartir fotos, entre ellos, la revista National Geographic. Esta dijo que suspendería la cuenta que tiene en el servicio fotográfico ahora propiedad de Facebook, debido a las modificaciones en las condiciones de uso.

Luego de que salieran a la luz pública los nuevos términos de uso de la aplicación fotográfica, que permitían usar el contenido de sus usuarios, su CEO, Kevin Systrom, desmintió esto y señaló que reescribirían los puntos confusos de la nueva política de uso de Instagram.

Entre algunos otros puntos, el nuevo documento de privacidad y uso de la aplicación incluye, además de la posibilidad de compartir datos de los usuarios con Facebook, algunos términos como “Algún o todo el servicio es soportado por ingresos por publicidad. Para ayudarnos a mostrar contenido sponsoreado o promociones, usted acepta que un negocio u otra entidad pueda pagarnos para mostrar su nombre de usuario, gustos, fotos (con su metadata incluida) y/o acciones que usted realiza, en conexión con el contenido sponsoreado, sin ninguna compensación hacia usted”, siendo esta la parte más polémica que hizo reaccionar de mala manera a una gran cantidad de usuaurios de Instagram.

Ante la furia de los usuarios y las amenazas de estos de cerrar sus cuentas en la red social de fotos, desde Instagram salieron a rectificarse en las partes más fuertes de la web, incluyendo Twitter, Facebook, y explayándose en su blog.

El CEO de Instagram, señaló que: “Nuestra intención al actualizar los términos era comunicar que queríamos experimentar con publicidad innovadora que sea apropiada para Instagram. En su lugar, eso fue interpretado por muchos como que íbamos a vender sus fotos a otros sin compensación. Esto no es verdad y es nuestro error que el lenguaje haya sido confuso. Para ser claros: no es nuestra intención vender sus fotos (…) Quedó claro que fallamos en el cumplimiento de la que yo considero una de nuestras responsabilidades más importantes: comunicar nuestras intenciones claramente. Lo siento por eso y estoy concentrado en solucionarlo”, señaló Systrom.

También dejó claro que los usuarios de Instagram son los dueños de su contenido y que la aplicación “no reclama ningún derecho de propiedad sobre las fotos”. “Respetamos que hay tanto artistas creativos como aficionados que ponen su corazón en crear hermosas fotografías, y respetamos que sus fotos son SUS fotos…”, señala Systrom en su post. “Quiero dejarlo muy claro: Instagram no tiene la intención de vender vuestras fotos, nunca la tuvo. No somos dueños de sus fotografías, ustedes lo son”.

Systrom también indicó que anularán la decisión tomada al principio y que, en vista del tremendo descontento de los usuarios, volverán a los términos que datan del año 2010. Con ello esperan detener la oleada de cierres de cuenta provocados por el polémico cambio.

Por último, el ejecutivo agradeció a los usuarios por haber dejado sus comentarios acerca del tema; así mismo les dijo que tendrían novedades pronto. Systrom afirmó que trabajarán en una nueva propuesta sobre productos publicitarios y la presentará a los usuarios a su debido tiempo.